¿Qué pasaría si Dios fuera juzgado por los hombres? ¿Será Dios juzgado en algún momento por la humanidad?
Todos hemos experimentado situaciones en las que de niños o adolescente no entendíamos ciertas acciones o determinaciones que tomaban nuestros padres o maestros en nuestro proceso educativo, llegando a juzgarlas incluso como injustas o simplemente incomprensibles para nosotros; pero una vez pasado los años e ir adquiriendo cierta madurez y conocimiento de la vida, poseer una mayor profundidad de visión y perspectiva, y así cambiar radicalmente de postura y poder decir: "Ahora comprendo el motivo y la razón de sus acciones". De igual forma todos hemos estado frente a un maestro que al momento de otorgarnos una calificación nos ha dejado muy claro todo el criterio de evaluación utilizado y el registro de nuestro desempeño, y así sentirnos completamente conformes con la valoración otorgada, reconociendo el proceso como verdaderamente justo y en concordancia con nuestro trabajo, sin poder reclamar absolutamente nada y más bien reconociendo a ese maestro como justo.
En el juicio eterno con todas las herramientas y la perspectiva completa, quedará muy claro cuál es la condición humana y nuestras acciones, y el porqué de las acciones y sentencia de Dios; a partir de esto no podremos dudar de que Dios tomó las decisiones más justas sobre la humanidad, quedando además absolutamente claro que ante ÉL no somos nada y que no hay nada que reclamar, sino más bien con un profundo agradecimiento por su amor inmerecido y gracia ante nuestra condición para aquellos que hemos decidido creer en ÉL. En esa misma claridad juzgaremos a Dios como un juez absolutamente justo, dándole la completa gloria por quién es ÉL y por su justica eterna, pudiendo además participar de su eternidad por medio de su gracia y misericordia. ¡Dios justo, misericordioso y amoroso!
Nota: Hablamos de juicio en el sentido de evaluado o valorado, no desde la connotación de dar una sentencia a partir de poseer cierta autoridad.
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